Considere cuanto tiempo esta dispuesto a darle a su jardín y cuanto tiempo tendrá para disfrutar de el. Los jardines necesitan más que una buena tierra y agua. Las malas hierbas en el jardín no fomentan el crecimiento. Esto se puede traducir también como la energía estancada en el jardín.
Organizando el jardín
Un jardín lleno de malas hierbas y plantas silvestres eliminan las posibilidades de un jardín atractivo. Añádase a esto las flores muertas, hojas secas y otros desechos que se acumulan durante toda la temporada. La energía de esta forma esta bloqueada por el desorden. Esto contradice el objetivo de un jardín. Usted quiere que la energía positiva fluya hacia su vida, hacia su hogar. Tomarse el tiempo para cuidar de su jardín sin duda mejorará el flujo de energía positiva por todos lados.
Tómese el tiempo para disfrutar de la escena. Las plantas ofrecen una forma de liberar el estrés. Adelante, hable con sus plantas. ¿Necesita liberarse del estrés? Coloque sus manos, con sus palmas hacia abajo sobre un grupo de flores. Respire profundamente varias veces a medida que suelta sus frustraciones. ¡No se olvide de agradecerle a la planta! Quitar las malezas y las plantas muertas es un buen ejercicio desestresante.
El verano es muy corto, el jardín ofrece una escapada de las prisas de la vida. Nos conecta con la belleza de la tierra y mucho más.
Los Jardines Comunitarios Pueden Cambiar Vidas
Los jardines comunitarios pueden mejorar las vidas de personas de cualquier edad, raza, sexo y nacionalidad. Estos jardines realizados con el esfuerzo de todos hacen una diferencia positiva de a una planta a la vez.
Solo Riegue y Obsérvelo Crecer
¿Alguna vez ha ayudado a algún vecino con su jardín? ¿O plantado una pequeña maceta para un pariente anciano? ¿Compartido hierbas frescas para comer con alguien que tenga contacto con la jardinería? ¿Colocado un macetero de terraza con plantas anuales en la plaza de su barrio? ¿Pasado todo un día trabajando con un grupo escolar sembrando hortalizas de crecimiento rápido? ¿Unido a los trabajadores voluntarios para ayudar a sacar las malezas, rastrillar y mantillar en un espacio publico? Talvez ha ayudado a colocar una fuente de agua de pared o de cemento. Entonces usted ya es un jardinero comunitario, y forma parte de un gran movimiento social que cuenta con la capacidad de transformar vecindarios, unir a la gente a pesar de sus diferencias, e invertir en el futuro de nuestros niños.
Si esto le suena radical, es porque lo es. Para aquellos de nosotros que trabajamos en nuestro jardín instintivamente, sabemos porque nos la pasamos allá afuera haciendo pozos en la tierra o instalando fuentes de agua de pared, pero talvez nos hemos olvidado de la verdadera razón. Para los jardineros comunitarios, el movimiento es una inversión en el futuro para el lugar en donde viven, así como en el futuro de los niños, los cuales suelen crecer bajo situaciones difíciles. A través del programa Master Gardener, una extensión universitaria y los programas 4-H, los jardineros suburbanos vienen a los vecindarios y comparten su pasión con la gente de ciudad.
Además suceden muchas otras cosas. Muchos jóvenes del centro de la ciudad nunca han salido de sus vecindarios, por lo que las barreras se caen a medida que gente de diferentes estilos de vida trabajan para un objetivo en común. El orgullo cívico juega un papel a medida que los jardines comienzan a crecer y volverse más hermosos—hay mucho valor en el intenso y tangible sentimiento de orgullo que un jardín puede crear. Lo más importante es cultivar alimentos sanos y tratar los temas de salud publica tales como la diabetes y la obesidad. Este cierto aumento de la actividad física y acceso a vegetales frescos ha demostrado tener un efecto positivo en la salud, en especial en nuestra sociedad moderna, en donde la comida viaja aproximadamente 1300 millas desde el campo a nuestras mesas. Los jardines pueden servir también como lugares tranquilos en donde estar, ya que la mayoría cuenta con flores, bancos y fuentes de piedra artificial.
Los Bienes Comunitarios Pueden Juntarse Para Ayudar a Florecer Un jardín
Hay muchas formas de participar en este movimiento, y estas pueden ser tan simples como donar dinero, ofrecer financiar recursos, o trabajar como voluntario ayudando con el trabajo pesado como girar el suelo y esparcir mantillo. Júntese con un grupo de jardineros, ya sea una vez por semana o una vez por mes, y podrá conocer y ayudar a personas que dedican su tiempo a darle vida a los terrenos baldíos. Existen muy pocas actividades que nos nutren y sanan nuestros corazones y almas del mismo modo que lo hace la jardinería.
Construya Una Comunidad Con Los Jardines Comunitarios
- Un jardín comunitario le da muchos beneficios a un vecindario.
- Mientras un terreno baldío da la impresión de que a nadie le importa, un jardín genera esperanza a través de la belleza.
- La conexión con la naturaleza inspira y tranquiliza hasta aquellos que solo están pasando por ahí.
- Las abejas, los pájaros y las mariposas que se sienten atraídos a los jardines son grandes compañeros, ayudan con la polinización y con el control de los insectos, y además nos recuerdan que compartimos el mundo con la vida salvaje.
- Las tradiciones culturales de jardinería se practican y comparten.
- Aumenta el orgullo en el vecindario.
- La producción de alimentos por estación mejora el bienestar, fomenta hábitos saludables de alimentación, y crea conciencia de cómo se produce la comida y su importancia.
- La educación informal involucra mentes activas.
- Los lugares de reunión le dan más armonía al vecindario.
- La recolección de agua de lluvia conduce a una mayor conciencia ambiental.
- La jardinería conecta a los habitantes de las ciudades con sus raíces rurales.
Como Empezar un jardín Comunitario
Esta es la lista de cosas para hacer:
- Identifique el espacio que pueda llegar a ser donado para el jardín. Pregunte por los terrenos de las iglesias, escuelas, bibliotecas, organizaciones de viviendas o propiedades abandonadas.
- Identifique los recursos que necesita para empezar, tales como las instituciones del barrio.
- Invite a los políticos u organizaciones locales a asegurar la tierra para un uso a largo plazo a un bajo precio y a ayudar con los seguros y otros trámites.
- Forme un grupo de al menos una docena de voluntarios para recaudar fondos, trabajar en el diseño, organizar voluntariados, y establecer normas y reglamentos.
- Organice reuniones para identificar a las personas y a los recursos necesarios. Busque personas con habilidades especiales que quizá no tengan una relación directa con la jardinera, tales como iluminación y planificación.
- Determine que es lo que la comunidad quiere del espacio: un lugar tranquilo, un lugar en donde los chicos puedan jugar, o quizás parcelas para cultivar alimentos.
- Establezca un grupo central para mantener la tierra.
- Apele a los programas locales de Master Gardener para conseguir asistencia voluntaria.
- Contáctese con la oficina de extensión cooperativa de su Universidad local para que los puedan ayudar asegurándole los recursos y resolver cuestiones burocráticas, tales como la limpieza de toxinas.
Desarrolle una estrategia de recaudación de fondos comenzando con el grupo y busque ayuda de la gente y empresas del barrio. Este tipo de apoyo destaca la importancia del jardín e incluye algo precioso como un arreglo de piedra artificial con agua.
