Las personas utilizan purificadores de aire en su casa y oficina para poder sacar la polución y los contaminantes del aire. Pero ¿de qué se trata esta polución y por qué debería esto importarle?.
Bacterias: las bacterias del aire pueden ser un problema, por lo menos. Algunas enfermedades como el tétanos, la fiebre tifoidea, la neumonía, la sífilis, el cólera, la lepra y la tuberculosis son productos de estos patógenos aéreos. Afortunadamente, no todas las bacterias son tan peligrosas, también existen «bacterias amigables», que le ayudan y que viven en algún lugar privado, como su páncreas, lejos del alcance del purificador de aire.
Esporas de moho: el moho es un hongo como lo son los champiñones. El moho se reproduce a través de las esporas, que vuelan en el aire y agravan algunas alergias. Algunos mohos son tóxicos cuando son inhalados. El moho negro, que puede crecer sobre la comida, puede producir la seria enfermedad de pulmón llamada aspergilosis, si se inhalan grandes cantidades. El moho es un problema en los edificios que tienen poca circulación de aire y tienen demasiada humedad atrapada.
Virus: son las partículas microscópicas y los microorganismos que pueden infectar las células de un organismo biológico, por ejemplo, usted. Estos no necesitan presentación. Las personas con un sistema inmuno deficiente por una presente condición médica deberán tener la menor cantidad de virus en el aire posibles.
Desechos de mascotas: cuando hablamos de desecho nos referimos a las partículas de pelo y piel que desprende la mascota y que causan reacciones alérgicas en las personas que tengan estas inclinaciones, frecuentemente manifestadas a través del estornudo. Las inflamaciones de piel también pueden ser una reacción alérgica a los desechos de la mascota.
Polvo: sin importar cuánto limpie usted, hasta en la casa más pulcra, el polvo aparece. Algunas personas con alergias al polvo pueden tener una reacción extrema. Otro problema de este estilo se encuentra en los lugares de trabajo pesado. Si el producto que se fabrica así produce suficiente polvo, puede hasta constituir un peligro para la salud.
Ácaros: estas pequeñas criaturas viven en ese polvo que usted no quería tener. Su nombre verdadero es Dermatofagoides pteronyssinus en Europa y Dermatofagoides farinae en América, pero sin importar el nombre por el que se lo conozca, siempre son un problema. Los ácaros son conocidos como la principal causa de asma en todo el mundo. Desafortunadamente, estos pequeños bichos viven en la misma clase de alfombras, y ambientes acolchados que los humanos disfrutamos tener.
Humo: el hábito de fumar puede causar bastante suciedad. Un purificador de aire puede ayudarle a vivir con esa chimenea humana en su casa. Hasta puede ayudarle a la salud del mismo fumador, cuando no tenga que salir a la intemperie cada vez que quiera fumar.
Olores: estoy hablando de aquel olor obvio en que nadie piensa. Los purificadores de aire pueden ayudar a dispersar los aromas de la pintura, blanqueadores y solventes químicos del aire. Si estos olores ofender a su nariz, un purificador de aire podrá deshacerse de ellos.
Bueno, eso cubre casi todo. Parece sorprendente la cantidad de cosas que ocurren en frente de nuestras narices sin que nos demos cuenta, ¿no?