Un sistema de ventilación eficiente para su sauna es posiblemente el segundo elemento de seguridad más importante; siendo el primero la buena instalación del factor productor de calor para evitar accidentes. Y es que la ventilación, es lo que hará el sauna apto para su uso, ya sea comercial o dentro de casa.
Desafortunadamente, existen muy pocas fuentes de información que expliquen con detalle cómo debe ser instalado este sistema de ventilación. Por eso, hoy en Visita Casas queremos aportarte valor y ayudarte en tu tarea de ventilar correctamente tu sauna. Ya sea que quieras construir uno en casa o en tu local de gimnasio; este artículo te será de gran utilidad.
¿Por qué es tan importante el sistema de ventilación para su sauna?
Una sauna es, de forma resumida; un espacio muy pequeño en donde la temperatura aumenta considerablemente, llegando a alcanzar una media de 100 grados centígrados. Muchas veces, dichas temperaturas elevadas vienen acompañadas de gran cantidades de vapor y; los saunas públicos se comparten con hasta diez personas.
Todos estos factores combinados sin un buen sistema de ventilación, fácilmente pueden causar lo que se conoce como sensación de histeria. Dicha sensación podría compararse con la claustrofobia o con ambas: una subida de la tensión o bajada de la tensión. En todo caso, va en contra de todo lo que en realidad se quiere lograr con la sauna; lo cual es una experiencia de relajación y limpieza de toxinas.
Además, existe un alto riesgo de envenenamiento por gases si no se utiliza la ventilación adecuada en una sauna calentada por rocas de magma. Pero, también es importante que la ventilación no sea en extremo excesiva; esto podría causar que el equipo de calefacción se vea forzado con el fin de alcanzar la temperatura ideal, la cual podría no conseguirse nunca debido al exceso de ventilaciones.
¿Cómo es un sistema de ventilación de sauna ideal?
Para que una sauna pueda considerarse correctamente ventilado, la cantidad de puntos de ventilación ha de ser 3. Esta cantidad es constante, sobre todo en las grandes saunas donde la instalación de las ventilaciones es más cómoda. No obstante, en las saunas más pequeñas; como las que construimos en casa, dicha norma no suele respetarse del todo, lo cual es un grave error.
Claro que, estas ventilaciones no tienen que ser excesivamente grandes, y es allí donde queremos hacer énfasis en este artículo. La cantidad es igual de importante que la calidad; al menos cuando se trata de ventilaciones para saunas, así que hablemos en detalle de cada una.
El sistema de ventilación ideal para una sauna se compone de la siguiente forma: una ventilación inferior que puede ser incluso de 3 centímetros, la ventilación en la pared, la cual suele ser de 15 centímetros como mínimo; y una ventilación en el techo.
Además de las medidas que son bastante específicas, todos los sistemas de ventilación así como la sauna, deben ser construidos con los materiales adecuados ¡pero no te preocupes, aquí te lo explicaremos todo! Comencemos por el que todos suelen ignorar.
Sistema de ventilación inferior
Ya sea que se trate de una sauna seca o húmeda; este requiere algún tipo de ventilación que deje entrar algo de aire fresco dentro de la habitación. Un sistema simple pero eficiente para las saunas más pequeñas; es dejar un espacio abierto al fondo de la puerta de entrada.
Ya que el aire caliente se eleva y el aire frío se queda cerca del piso, las personas no sentirán la corriente fría siempre y cuando se sienten en uno de los bancos.
Una pequeña abertura que vaya de 3 a varios centímetros; podrá proveer suficiente ventilación para reciclar el aire y así obtener una reconfortante sesión de sauna.
Por supuesto, esta medida aplica para los cuartos realmente pequeños; para los más grandes, la ventilación inferior va de la mano con la construcción del suelo.
Recuerda que, en una sauna realmente grande; el suelo se construye en dos pasos: primero los mosaicos, cerámicas o losas; y luego la madera. Y es en el primer paso de construcción donde se debe tener en cuenta la ventilación.
Siguiente un camino simple pero que recorra toda la sauna; esta ventilación será optima y, gracias al piso de madera que irá sobre ella, no afectará a la estética del lugar.
La ventilación lateral o de pared
Esta ventilación sí debería estar localizada a varios centímetros por encima del piso para proveer aire fresco. La salida debería estar localizada en la pared opuesta cerca del techo. Esta abertura removerá el aire usado del sauna, asegurándose cambios completos de aire y ventilación eficiente.
La ventilación apropiada también es una consideración de seguridad importante. El calor extremo encontrado en los saunas caseros secos y húmedos puede resultar en pisos calientes, paredes, techos y bancos si no existe sistema de intercambio de aire en las paredes.
Los constructores dicen que se debe evadir los métodos mecánicos de intercambio de aire que tiende a secar los paneles de la pared y las convierte en potenciales peligros contra incendio. Por lo que volvemos a las simples aberturas; esta vez de 15 centímetros.
¡Y ojo! Otro aspecto importante de un sistema de ventilación propiamente instalado; es poder descargar el aire gastado en la misma habitación donde se tomó. En otras palabras, no descargues el aire utilizado hacia afuera. Esto obviamente sólo se aplica a los saunas.
Ventilación en el techo
Esta es la ventilación más notoria en las saunas grandes. En combinación con techos transparentes para una buena iluminación; muchas saunas utilizan grandes paneles de vidrio en los techos para promover un mejor intercambio de aire.
Claro que, cuando se habla de una sauna pequeña, sobre todo dentro de una vivienda; muchas personas encuentran un poco complicado la manera de canalizar el vapor hacia el exterior del sauna a través de la ventilación en el techo.
Sin embargo, te recordamos que este es uno de los puntos de ventilación más importantes; debido a la manera en que funciona el vapor caliente, la salida más óptima es siempre la superior.
¿Qué material se debe de utilizar para la ventilación?
Ya sea una sauna grande en un local como el de un gimnasio, o para una sauna casera; el mejor material que puede utilizarse es la madera.
El mejor tipo de ventilación es el de rejilla regulable. Este puede utilizarse para la ventilación en la pared y; siempre debe dejarse abierta cuando la sauna no se esté utilizando.
Pero de seguro te preguntarás ¿por qué la madera? Después de todo, la humedad resta tiempo de vida útil a la madera. Constantemente lo vemos en los muebles de nuestro hogar; y combatir la humedad y el agua esa es la principal razón por la cual poseemos posa vasos.
No obstante, la madera amachambrada y otras maderas específicas como el cedro; son el mejor material para construir un cuarto pequeño en el que pasaremos un largo período de tiempo sentados y en calor.
Las principales características de estas maderas son:
- No tienden a expandirse mucho con el calor
- Tampoco suelen contraerse demasiado cuando el sauna está frío
- No absorben mucha humedad
- Pueden soportar temperaturas de hasta 230 grados centígrados
Es decir, todo lo que necesitamos para construir una habitación de este tipo. Y es que, a diferencia de los mosaicos, los cuales necesitamos que acumulen humedad; el resto de la infraestructura debe ser a prueba de agua.
Es cierto que el plástico puede ser una opción para instalar un sistema de ventilación rudimentario dentro de una sauna casera; pero no es conveniente utilizar PVC debido a lo fácil que éste puede incendiarse.
Por otra parte, la humedad y el metal no funcionan para este tipo de construcción. Incluso si utilizan una pintura anticorrosiva, las altas temperaturas causaran que, con el paso del tiempo; la pintura pierda su vida útil.
No solo tendrás un grave problema de oxidación, sino que, a lo largo del tiempo; la pintura podría convertirse en un foco de toxinas. Si dicha pintura se evapora, todos los gases que este desprendería irían a tus pulmones; quieres desintoxicarte y liberar toxinas, no todo lo contrario ¡Así que descarta los paneles de ventilación metálicos!