Cuidar y limpiar joyas no es algo difícil, pero es importante tener cuidado para evitar daños y ayudar a que las piezas tengan una mayor duración.
Las joyas bien cuidadas pasarán la prueba del tiempo y tendrán una mejor apariencia que las joyas que no se cuidan o limpian. La técnica usada para limpiar y cuidar de las joyas depende de la pieza en si.
Independientemente del tipo de joya que sea, usted debe tratar de evitar que se raye y que se golpee. Puede ocurrir que una joya se golpee, y que el daño no se perciba inmediatamente. Con el tiempo estos daños se acumularán y empeorarán hasta que su joya se vuelva irreparable.
¿Cómo limpiarlas?
Las joyas son a menudo un artículo preciado, que se lleva para realzar un atuendo o para mostrar el estilo personal. Sin embargo, si las joyas no se limpian con regularidad, pueden cubrirse de suciedad, polvo y otros residuos, lo que puede dañar la pieza con el tiempo.
Para limpiar las joyas, necesitará unos cuantos suministros básicos: agua tibia, jabón para platos, un paño suave y un cepillo de dientes.
En primer lugar, llene un recipiente con agua tibia y añada unas gotas de jabón para platos. Agite suavemente las joyas en el cuenco hasta que queden limpias.
A continuación, utilice un paño suave para secar las joyas y cepille cualquier resto de suciedad o residuos con un cepillo de dientes.
Es importante que limpie sus joyas con regularidad para que mantengan su mejor aspecto. Siga estos sencillos pasos y sus joyas se mantendrán relucientes durante años.
¿Qué hacer si mi joya se daña?
Si sus joyas sufren algún daño, trátelo inmediatamente. Lleve la pieza a su joyero local y pídales su opinión. En la mayoría de los casos podrán arreglar la joya, o enviarla a algún lado para que la reparen adecuadamente.
Tratar de arreglar la joya por su cuenta usando pegamento, no es una buena idea.
Muchos productos químicos pueden dañar las joyas, por lo que trate de evitarlos. En particular, los líquidos limpiadores, el cloro y el bromo, pueden tener un efecto perjudicial en algunas joyas.
Si va a trabajar con alguno de estos productos, quítese sus anillos u otros objetos y guárdelos en un lugar seguro hasta que haya terminado. La luz solar directa y las condiciones extremas de calor o frío también pueden debilitar el metal o la joya.
Consejo: guarde sus joyas si no las utiliza
Cuando no esté usando sus joyas, guárdelas en un recipiente cerrado o en una bolsa. Esto la protegerá del polvo, la suciedad y otros residuos que pueden provocar arañazos y deslustre.
Hay algunas razones por las que debería conservar sus joyas aunque no las use:
- En primer lugar, sus joyas pueden ser un activo valioso. Si alguna vez necesita venderlas, obtendrá más dinero por ellas si están en buen estado.
- En segundo lugar, sus joyas también pueden ser un activo sentimental. Muchas piezas de joyería tienen un significado especial para su propietario y pueden ser difíciles de reemplazar.
- Por último, mantener sus joyas en buen estado le ayudará a proteger su valor a lo largo del tiempo.
Además, le recomendamos que para evitar que se raye o se astille su joya, no la lleve mientras realiza actividades bruscas como la jardinería o las tareas domésticas.
Además, tenga cuidado al ponerse y quitarse la ropa, ya que elementos como los botones y las cremalleras pueden engancharse en las joyas delicadas y causarles daños.
Siguiendo estos consejos, le ayudará a mantener sus joyas con el mejor aspecto. ¡Disfrute llevando sus joyas relucientes y limpias!
Tips de mantenimiento
Utilice un paño de limpieza de joyas para limpiar las joyas de metal y límpielas con regularidad usando agua con jabón, y asegúrese de enjuagarlas bien cuando haya terminado de limpiarlas.
Use un paño suave para secar la pieza, y trate de no frotarla muy fuerte. A su vez, tenga cuidado al guardar sus joyas. Si no tiene la intención de usarlas por mucho tiempo, guárdelas en una bolsa hermética, y colóquela en un lugar que no sea ni demasiado fresco ni demasiado cálido.
Estos simples consejos de mantenimiento debe garantizarle la integridad de sus joyas por muchos años.
Síntesis
En conclusión, para limpiar sus joyas, empiece por utilizar un cepillo suave para eliminar la suciedad o los restos. Si sus joyas están muy sucias, puede ponerlas en remojo en un recipiente con agua tibia y un detergente suave durante unos minutos. Tras el remojo, utilice el cepillo para limpiar suavemente las joyas.
Aclare bien las joyas con agua tibia y séquelas con un paño suave antes de guardarlas. Debe evitar utilizar productos químicos o limpiadores agresivos en sus joyas, ya que pueden dañar el acabado.
Cuando limpie las piedras preciosas, asegúrese de utilizar sólo un cepillo suave y un jabón suave para evitar rayar la superficie.
Incluso, si necesita eliminar manchas difíciles o acumulaciones de su joya, puede probar a sumergirla en vinagre durante la noche.