Suele ocurrir que durante las épocas de sol y calor, el césped se seca o muere en aquellas partes inclinadas del terreno y colinas. Esto se debe principalmente a que el agua desliza antes de llegar a penetrar en el suelo.
Mantener el suelo húmedo es la clavo para que el césped y las plantas crezcan sanas y fuerte. Para ello necesita regar con más insistencia en aquellas zonas para ayudar a que las raíces crezcan más profundas que toleran mejor los avatares del verano.
El que el agua fluya y apenas sea absorbida por la superficie, obviamente no es algo bueno para el césped que se espera que allí crezca. ¿Cómo se hace entonces para lograr una mayor eficacia en el riego de estas partes del terreno?
Ciclos de riego
Divida su ciclo de riego en dos o tres ciclos más cortos. Si usted suele regar el césped durante 30 minutos, entonces divídalo en tres ciclos de 10 minutos.
De manera que los días que le toca regar, implemente este sistema regando durante el tiempo estipulado, luego espere un par de horas y repítalo las veces que sea necesario.
• Para determinar el tiempo exacto que debe durar cada ciclo, encienda los rociadores y espere a ver cuánto tiempo tarda en empezar el agua a correr. Este es el máximo de tiempo que debe tomar cada ciclo.
• No divida los ciclos en diferentes días.
Su suelo necesita que se lo riegue a fondo para crecer sano. Es mejor para las plantas y el césped regarlos con poca frecuencia pero con intensidad, más que poco y muy seguido.
Todas las plantas de su jardín se beneficiarán de esta forma de riego. Las mismas deben plantarse en hoyos más profundos y ser rellenados con tierra de buena calidad que absorba el agua fácilmente.
A su vez, conviene hacer una barrera al costado de las plantas, del lado mas bajo de la cuesta, para que el agua quede retenida durante más tiempo y así se absorba mejor antes de seguir fluyendo cuesta abajo.
Utilice un temporizador
Cuando se trata de conservar el agua, utilizar un temporizador y un sensor automáticos para su sistema de riego es una de las mejores cosas que puede hacer.
Un temporizador automático puede configurarse para encender y apagar su sistema de riego en momentos específicos, lo que ayudará a conservar el agua. También se puede utilizar un sensor para detectar cuándo ha llovido o nevado y apagar automáticamente su sistema de riego.
Esto ayudará a ahorrar aún más agua. Además, el uso de un temporizador y un sensor automáticos le ayudará a reducir su factura de agua. Así que, si está buscando formas de ahorrar agua y dinero, considere la posibilidad de invertir en un temporizador y un sensor automáticos para su sistema de riego.
Es decir que, el control remoto de su sistema de riego puede ahorrarle tiempo, dinero y conservar los recursos hídricos. Utilizando un temporizador automático para establecer horarios específicos de encendido y apagado de su sistema, o un sensor que detecte las precipitaciones, puede asegurarse de que su jardín recibe la cantidad justa de agua que necesita, ni más ni menos.
Esta práctica no sólo ahorra valiosos recursos, pero también puede ahorrarle dinero en su factura de agua.
¿Cómo cuidar las zonas inclinadas del terreno?
Cuando se cuidan las zonas inclinadas del terreno, es importante asegurarse de que el suelo está adecuadamente hidratado. Esto puede hacerse regando la zona con regularidad, utilizando una manguera de jardín o un sistema de aspersión. Asegúrese de evitar saturar el suelo, ya que esto puede provocar la erosión.
También es importante tener en cuenta la inclinación de la pendiente al plantar la vegetación. Las plantas que prefieren suelos más secos, como los cactus y las suculentas, deben plantarse en pendientes más pronunciadas, mientras que las plantas que prefieren suelos más húmedos, como los helechos y las hostas, deben plantarse en pendientes más graduales.
Cuando corte o recorte la vegetación en un terreno inclinado, asegúrese de utilizar un cortacésped diseñado para ello. Tenga mucho cuidado al manejar el cortacésped, ya que existe el riesgo de que vuelque si no se utiliza correctamente.
El riego y el cuidado de las zonas inclinadas puede ser un reto, pero si sigue estos consejos podrá asegurarse de que su suelo se mantenga hidratado y sus plantas se mantengan sanas.
Además de elegir las plantas adecuadas, hay otras cosas que puede hacer para asegurarse de que su terreno inclinado esté sano y feliz:
- Regar con regularidad: Los terrenos inclinados tienden a drenar rápidamente, por lo que es importante regar con la suficiente frecuencia para mantener la tierra húmeda. Una buena regla general es regar dos veces por semana durante la temporada de crecimiento.
- Ponga mucho mantillo: El acolchado le ayudará a evitar la erosión y a mantener el suelo húmedo. Asegúrese de utilizar una capa gruesa de mantillo (al menos 15 centímetros) y rellénela según sea necesario a lo largo del año.
- Abone regularmente: Al igual que cualquier otro tipo de jardín, los jardines en pendiente necesitan una fertilización regular para mantenerse sanos y prosperar.
Plantas para este tipo de terreno
Cuando se trata de plantar en un terreno inclinado, es importante elegir plantas que puedan soportar el estrés adicional que supone vivir en una pendiente.
Hay una serie de plantas que se ajustan a esta descripción, entre ellas:
- Arbustos como el viburno y el brezo
- Plantas tapizantes como la hiedra y la vincapervinca
- Árboles como el abedul y el sauce
Todas estas plantas son fáciles de cultivar y mantener, y le ayudarán a mantener su terreno inclinado con un aspecto hermoso y saludable.