Cuidados del perro Mascotas para el hogar

El perro Lebrel escocés y su uso decorativo

Ese tipo de perros, el lebrel escocés o Deerhound, es uno de los más decorativos. De un porte muy pintoresco por donde se lo vea, ya sea en las premisas de una sala baronal, reclinado enfrente de una lujosa chimenea; en el exterior, entiendo el aire en sus pulmones, o graciosamente saltando sobre sus montañas nativas. La gracia de cada movimiento y actitud, y una mente más que prosaica le dan glamour propio del romance feudal y de la poesía. Se lo compara con el perro Terranova.

Desde los días remotos, como menciona cualquier historia del perro, los escoceses nobles han querido al Lebrel Escocés, para usarlo en los deportes gloriosos de los bosques de Highland. El ciervo común pertenecía por una ley inexorable al rey de Escocia y en sus grandes paseos en coche, que a menudo duraban 20 días, los usaba para llevar el rebaño a los vecindarios vecinos para el placer de la corte, como en la época de la reina María. Pero la caza de venados organizada con perros y hecha por cortesanos cesó durante los problemas con Stuart, y se quedó en manos de los retenedores, quienes así reabastecieron la despensa del cocinero en jefe

lebrel escoces

Cabeza:
La cabeza debería ser más ancha en las orejas, afilándose hacia los ojos, con el hocico afilándose más decididamente hacia la nariz. El hocico debería ser puntiagudo, pero los dientes y labios deberían estar nivelados. La cabeza debería ser larga, y el cráneo debería ser plano más que redondo, con una pequeña subida sobre los ojos. El cráneo debería estar cubierto de un pelaje moderadamente más largo que el resto del cuerpo. La nariz debería ser negra (aunque en algunos es azul) y levemente aguileña. En los perros de colores más suaves es preferido un hocico negro. Debería haber un buen bigote de más bien pelo sedoso, y una barba considerable.

Orejas:
Las orejas deberían estar altas y, en el reposo, deberían doblarse como las del galgo inglés, pero deberían levantarse por sobre la cabeza cuando se excita sin perder el pliegue y, en algunos casos, quedan semi-erectas. La oreja debería ser suave, tersa y, al tacto, parecerse el pelaje de un ratón. Mientras más pequeñas sean, mejor. No debería tener un pelaje largo ni un flequillo largo, pero hay a menudo un pelaje sedoso, plateado en el cuerpo de la oreja y en la punta. Sin importar el color general, las orejas deberían ser negras o de color oscuro.

El cuello y los hombros:

El cuello debería ser largo, de una longitud similar de la del galgo inglés. La nuca debería ser muy prominente donde está colocada la cabeza, y la garganta debería estar claramente delineada en el ángulo y prominente. Los hombros deberían estar bien inclinados, con las escápulas bien atrás, sin demasiada distancia entre ellas.

La cola:

La cola debería ser tolerablemente larga, acuminada, y debería colgar a 4 centímetros del suelo, y a la misma distancia por debajo de los corvejones. Cuando el perro esté quieto, debería caer perfectamente derecha, o encorvada. Cuando esté en movimiento o excitado debería estar encorvada. En ningún caso debería levantarse por sobre el nivel de la espalda. Debería estar bien cubierta de pelos, por dentro debería ser gruesa y larga, la parte inferior más larga.

Los ojos:

Los ojos deberían ser obscuros, generalmente de color moreno oscuro o avellano. Están moderadamente llenos de una apariencia suave en el reposo, pero cuando está excitado tiene una mirada fija aguda, muy alejada. Los bordes de los párpados deberían ser negros.

Un lebrel para el hogar


El cuerpo:

La formación general del cuerpo es de gran tamaño y huesos. Su pecho es profundo, pero no muy estrecho ni plano. El lomo se presenta bien arqueado y encorvándose hacia la cola.

Patas y pies:
Las patas deberían ser amplias y planas, con un amplio antebrazo y codo. Las patas delanteras, desde luego, tan derechas como sea posible. Los pies cerrados y compactos, con los dedos del pie bien arqueados. Los muslos traseros inclinados, tan amplios y poderosos como sea posible, las caderas puestas muy separadas. Las patas traseras deberían estar bien dobladas en la babilla, con gran distancia entre la cadera y los corvejones. Éstos últimos deberían ser amplios y planos.

Pelaje:
El pelo sobre el cuerpo, cuello, y muslos traseros debería ser áspero y nervudo, y de aproximadamente 7 a 10 centímetros de largo. Sobre la cabeza, el pecho, y el vientre es mucho más suave. Debería haber una franja leve cabelluda en el interior de las patas traseras y delanteras. El Lebrel Escocés debería ser un perro peludo, pero no demasiado cubierto de pelaje.

Color:
El color elegido es una cuestión de preferencias, pero no hay duda de que el gris-azulado oscuro es el más popular. Luego vienen los de gris más suave y oscuro, o manchados; siendo los más oscuros los preferidos. De misma manera se estiman a los amarillos y rojos-arenas o rojos-cervato, especialmente los que tienen puntos negros.

Altura:
Van de 70 a 75 centímetros de altura, o hasta más si son simétricos, algo que igual es raro de encontrar. Altura de las perras: de 65 centímetros para arriba. Pueden ser mas grandes, a menos que sean toscas, ya que, hasta en la mayor altura, no llega a ser igual de alta que el perro, y por eso, no puede ser usada para trabajos, al igual que los perros.

Sobre el autor

Nilda Nora

Soy Nilda Nora y me gusta escribir sobre decoración de interiores. Si quieren contactarme o tienen alguna consulta que hacerme, aquí debajo tienen mis redes sociales.

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