Entrenando a las ramas de nuestras plantas para que vayan donde queramos

Mucha gente asocia el podado con el cambio de la estructura del árbol para poder llegar a diferentes formas o estilos. Sin embargo éste no es el caso. Alterar la estructura de un árbol se conoce como un «entrenamiento de árbol». Es una muy buena manera de desarrollar una forma alternativa para su árbol. El podado debería ser usado para prevenir las enfermedades, para prevenir las deformidades y para alentar el crecimiento sano de las frutas.

El podado también se usa para mantener la forma propia de un árbol; en cambio, colocarle un tutor al árbol lo hace crecer derecho. Por ejemplo, si tiene una abundancia de ramas en un lado particular del árbol, entonces puede usar el podado para deshacerse de aquellos segmentos que hacen pesar el árbol hacia un lado. Piénselo en términos de mantenimiento, más que de alteración. Mientras que el podado es bastante útil ocasionalmente, la mayoría del tiempo usted puede usar otras técnicas de entrenamiento más saludables y eficientes. A veces, simplemente debe sacar de raíz un árbol viejo.

El entrenamiento no tiene que ser algo que tome mucho tiempo. Por medio del atado de ciertas ramas o recogiendo las del suelo, uno puede afectar directamente el crecimiento del árbol para lograr la forma que quiera. Esta teoría es usualmente aplicada en la época temprana del árbol para alentar su crecimiento. Si puede lograr esto desde el principio, se ahorrará mucho podado en el futuro. Usualmente, el entrenamiento ocurre durante el verano. Empiece a cortar aquellas ramas que no le gustan, o puede probar redireccionándolas. El mecanismo usado puede ser pensado como un aparato de ortodoncia para sus árboles frutales. Es para acercar o alejar las ramas, como los dientes, en cualquier dirección que uno quiera. Eventualmente crecerán de manera natural de esa forma por entrenamiento.

Decidir la manera de entrenar su árbol puede ser bastante difícil. Hay muchas formas distintas de dónde elegir. Algunas están diseñadas para permitir una alta densidad de árboles en un huerto, y otras están hechas para promover la máxima cantidad de frutas. Dependiendo del lugar donde esté su árbol y cómo quiere que funcione, tendrá que elegir los distintos tipos para encontrar el que se adapte a su situación. Las teorías de entrenamiento también pueden ser aplicadas en los árboles de forma tradicional. Algunas veces las ramas pueden crecer muy cerca las unas de las otras y bloquearse, así que usted puede hacer uso del entrenamiento para prevenir una poda futura. Esto le dará muchos beneficios hasta si está haciendo crecer un árbol en su patio, en un ambiente no profesional.

Para entrenar un árbol, necesitará alguna especie de ayuda exterior para empujar o atraer a las ramas. Alternativamente, si quiere acercar dos ramas o alejarlas, puede poner algo en el medio o atarlas con un piolín. El entrenamiento exitoso sólo necesita de un poco de imaginación al momento de decidir qué atar y con qué. Me he dado cuenta de que las estacas y cercas pueden hacer maravillas. No hay ningún aficionado a los árboles que no pueda beneficiarse de estas técnicas de entrenamiento. Ya sea porque ha decidido darle a sus árboles una forma completamente nueva, o sólo desea optimizar la forma de las ramas para conseguir frutas más saludables, seguramente podrá encontrar un tipo entrenamiento que lo beneficie.