Luego de años en la universidad de la vida, aquí en Visita Casas hemos aprendido que: tener una laminadora en casa nunca está de más. Es lo mismo que decir “nunca se es lo suficientemente precavido” sólo por prever una laminación de última hora.

La laminación es simplemente el proceso de envolver un documento entre dos capas de película de plástico y sellar los bordes con el fin de proporcionar protección contra las influencias externas que le podrían causar daños.

Las fotos, carteles, cartas, certificados y tarjetas; son todos ejemplos de documentos que utilizan esta técnica comúnmente. Estos pueden ser producidos profesionalmente o con productos especiales para laminado que se utilizan en el hogar.

De los diferentes tipos de laminadores que están disponibles, hemos tenido la dicha de probar varios de ellos; no solo propios sino a través de las experiencias de personas cercanas.

Por eso hemos decidido compartir nuestra experiencia con ustedes, para que, si en algún momento deciden comprar una laminadora; no pasen por las torturas que nosotros sufrimos.

¡Los Secretos del Laminado Desvelados!

Plastificar es prácticamente garantizar que las cosas perdurarán por mucho más tiempo. Tal vez más que nosotros mismos.

¿Sabes cuánto tiempo le toma al plástico descomponerse?

Pues estamos hablando de sellar entre dos láminas de plástico impermeables un documentos importante para nuestra vida; definitivamente una decisión de sabios.

En la actualidad existen dos procesos de laminación:

• Laminación térmica
• Laminación en frío

Cada una está pensada para el tipo de documentos que tengamos. Por ejemplo; los certificados viejos a punto de romperse requieren definitivamente una laminación en frío para evitar daños severos durante el proceso.

Otro tipo de papel que requiere cuidado con las pinturas, especialmente las acuarelas; pensando en ellas se diseñó la laminación en frío. Aunque para poder hacer uso de esta alternativa es necesario fundas especiales.

Las fundas son el nombre que reciben los componentes plásticos que protegerán al documento seleccionado. En una laminación térmica clásica; el documento se introduce dentro de la funda (que es como un cuaderno plástico de una simple página) hasta llegar al fondo.

Una vez se ha colocado el documento dentro de la funda, se presenta a la máquina; siempre con el extremo cerrado hacia la máquina y, una vez alineado; se deja que la máquina comience a hacer su trabajo.

Tan sencillo como que el documento entrará por una ranura de la máquina dentro de la funda y, en unos instantes; saldrá por otra abertura ya integrado con el plástico. Siempre y cuando se usen rodillos. Máquinas más grandes aplican la termodinámica a través de planchas. Una vez extendido, el adhesivo comienza a enfriar y se va endureciendo, para poder formar un vínculo permanente entre la película y la impresión.

Un tip importante, siempre, al sacar un documento recién laminado; colócalo debajo de algo pesado y totalmente plano por debajo. Un block, una enciclopedia; algo de ese estilo evitará que se doble extrañamente y termine por deformarse.

Eligiendo las Láminas

Las láminas son una parte crucial a la hora de realizar esta clase de trabajo, ya sea que quieras llevar el negocio a casa o para uso personal como plastificar recetas para tu libro de cocina.

Lo primero que debes atender es a las micras, el valor más pequeño es 80 micras y; este representa el grosor del material que, puede o no ser compatible con la laminadora.

Hasta los momentos las láminas se fabrican con poliéster y resina; uno pensaría que no tienen mucho misterio, sin embargo; si hay uno que otro detalle a tener en cuenta además de las micras.

 

El primer factor importante es el costo. Existen muchos packs de 100 láminas por un bajo costo de 12$ y hasta 6$; pero siempre presta atención a lo siguiente:

Obviamente las micras; aunque lo mínimo son 80 micras, lee con detenimiento cuánto se supone que debería pesar ese paquete de láminas que quieres llevar según las instrucciones. Hay láminas que prometen calidad al 100% y resultan que su equivalente de dureza es como si fueran de 60 micras. Sin dos paquetes de 100 láminas de 80 micras pesan distinto, compra el más pesado.

Observa qué tipo de materiales pueden ser laminados ¿otorga dureza al material una vez laminado como es el caso de las señalizaciones? Entonces puedes llevarlas con confianza.

Verifica bien los milímetros, ¿es una lámina para papel A3, para A4? ¿Cuál es la máxima capacidad que acepta tu laminadora?

Eligiendo la Mejor Laminadora

Ahora sí, veamos el plato fuerte. Primero que nada debo decirte que; el mejor precio del mercado no es el más económico cuando se trata de calidad/precio. Eso sí,no deberías hacer una inversión superior a los 15$ para adquirir un producto de calidad.

Mi primera recomendación es que compres a buenas primeras una laminadora que te permita realizar trabajos en frío.

¿Qué pasa si no la necesito para laminar en frío?

Fácil de responder, ¿Qué pasa si algún día necesitar laminar al frío?

Debes comprender que, este tipo de máquinas no es algo que puedas vender luego de un tiempo; si no aprovechas y haces la inversión ahora de forma completa, puede que más adelante pierdas el dinero. Compra una con tecnología para laminar en frío.

Otro consejo que quiero darte es: No te conformes con las 80 micras. Varios modelos pueden ser graduados para las 125 micras e incluso 150 micras. Este cambio afecta directamente la temperatura a la que calienta.

No importa que tan buena sea tu laminadora, si dice que calienta para laminar como máximo a 80 micras; ningún trabajo que requiera más calor quedará bien.

Señalados los puntos generales hablemos ahora de los puntuales, aquellos que debes buscar en tu laminadora ideal.

Tiempo de calentado

Si hiciste una inversión para poder hacer todo dentro de la casa u oficina, es decir; para evitar salir a la papelería más cercana a laminar lo cual te demora 15 minutos. No compres una laminadora con un tiempo de calentado de 15 minutos.

En el mercado hay opciones que son capaces de alcanzar la temperatura óptima a luego de pasados 2 o 5 minutos de encendida; dependiendo de las micras a laminar.

El consumo

La primera laminadora que tuve hizo que se me disparara la factura eléctrica como nunca lo había imaginado; fue entonces cuando aprendí a leer el consumo en Watts de los equipos.

Te recomiendo que adquieras una con función de auto apagado para evitar que suceda esto.

Milímetros por minuto

La velocidad a la que avanzan éstas máquinas viene dada en milímetros por minuto.

¿Cuánto tiempo te llevará laminar ese poster que tanto te gusta? Pues lee lo que dice la máquina con respecto a sus mm/min y; si tarda más que eso luego de tus cálculos, pide que te devuelvan tu dinero o la cambien por defecto de fábrica.

Kit de inicio

Algunas máquinas vienen con un kit de inicio, es decir; suficientes láminas para que hagas tu primer trabajo; si te vas a equivocar, mejor que sea ensayando con algo “gratis”. Busca ofertas, compra inteligente.

Sistema de retroceso

Así es, si a pesar del kit de inicio sigues cometiendo errores.

¡Mejor una que permita corregirlos!

Muchas veces se forman arrugas o pliegues, son cosas que pasan; por eso las máquinas con ésta función son tan geniales. De todas formas, algunas láminas vienen con capacidad para prevenir las arrugas.

En conclusión, no hay necesidad de gastar mucho pero, si quieres tener el Rolls Royce de las laminadoras que te permitirá trabajar tranquilo; prepara la tarjeta.

Referencias

Amazon – Laminadora

AmazonBasics – Plastificadora A4: Amazon.es

Olympia 4 in 1 Set A 230 – Plastificadora A4 con fundas