Seguridad para el hogar

Instalando cajas fuertes en su casa

Una de nuestras necesidades básicas consiste en proteger nuestros vienes y objetos de valor. Cuántas veces nos hemos preguntado: ¿Es seguro tener las joyas y el dinero en nuestro hogar? ¿Correrán mis hijos el riesgo de dispararse si compro un arma? ¿Quedaré en bancarrota si se incendia mi oficina?


La necesidad de bóvedas apareció al poco tiempo de que la humanidad descubriera la moneda, el oro y otros objetos de valor. Hasta 1820 sólo servían para prevenir robos, pero a partir de 1840s fueron diseñadas, usando la tecnología Wilder, para proteger también en caso de incendios. La caja fuerte a prueba de robos fue patentada en 1835 por Chubb Safes (se cree que ya se fabricaban 20 años antes).

Existe una industria avanzada detrás de las cajas de seguridad: usualmente hechas de metal, son diseñadas para resistir al fuego y a cualquier tipo de ambiente, y en la actualidad utilizan electrónica de alta tecnología, puertas cortadas con laser y capacidad de almacenamiento de memoria. Uno de los proveedores de seguridad más grandes del mundo es Sentry Safes. Ofrecen alta calidad a precios competitivos y existen en el rubro hace más de 70 años, siempre manteniéndose fiel a las creencias de sus creadores: calidad, asequibilidad e innovación.

Las cajas fuertes en general tienen dos principales destinos, oficinas y casas y pueden clasificarse en tres grandes tipos:

1) Cajas fuertes contra robos:
Ofrecen protección contra robos, pero muy poca resistencia a incendios. Suelen tener paredes de metal sólido y una pesada puerta resistente a taladros, palancas, etc. Los metales duros y resistentes se suelen usar para soportar robos y aperturas ilegales.

2) Cajas fuertes contra incendios:
Suelen estar hechas de una pared de dos capas metal fino y un revestimiento de material ignífugo entre ellas. Ofrecen un mínimo nivel de seguridad, porque están diseñadas especialmente contra el fuego. Deben mantener una temperatura interna menor a los 200 grados centígrados (el punto en el que los documentos se incendiarían). Las cajas de seguridad proveen protección contra el fuego por 30, 60, 90 o 120 minutos. De estilo similar, pero un tanto más efectivas, están las “Data Safes” (cajas de seguridad de datos) que mantienen el ambiente a menos de 52 grados centígrados (el punto en el que los datos electrónicos se echarían a perder) y también protegen contra altos niveles de humedad, contaminación electromagnética, etc.

3) Cajas fuertes contra robos e incendios: Son en general cajas de seguridad para varios propósitos, y ofrecen una buena protección tanto contra robos como contra fuego. Están diseñadas como cajas contra robos, pero con una pared secundaria interior, que contiene aislante (el material que permite mantener baja la temperatura).

Usualmente, las cajas fuertes de hogares son utilizadas para prevenir el robo o destrucción de las propiedades de su familia: dinero, papeles como recibos, contratos, documentos personales y financieros, joyas y hasta algunos elementos que considere irremplazables: fotos, videos. Para poder procurar una buena protección de nuestros objetos de valor, necesitaremos cajas de seguridad contra robo e incendios. Este tipo de cajas de seguridad suelen instalarse en paredes o sobre el suelo.

La cajas que se instalan en la pared requieren un enmarcado especial, y es recomendable que sean instaladas lo menos elevado posible porque, en caso de incendio, la temperatura es menor a menor altura. Resultan muy prácticas para aquellos que valoran sus posesiones, pero no quieren resguardarlas en un banco. Son fáciles de instalar y de acceder, no requieren que se hagan especiales modificaciones al interior o al diseño de su hogar.

Si no posee dinero suficiente para comprar una caja fuerte profesional, es siempre mejor acordarse de los “dispositivos para esconder”, como un libro falso. No se ven a simple vista como las típicas cajas de seguridad, y aunque no protejan su contenido contra un incendio, pueden evitar que un potencial ladrón se los robe.

Se pueden usar como escondites gaseosas, frutas enlatadas, productos de limpieza del hogar o incluso libros. Poseen una cobertura o un fondo removible, por lo que podremos esconder los bienes de valor sobre los productos. En apariencia será algo normal, y es mucho más económico que una caja de seguridad. Tampoco hay que olvidar que la forma más efectiva de prevenir un trágico accidente con un arma es utilizando la traba de protección. Suelen estar hechos de acero, y su tamaño depende del tamaño del arma que querrá asegurar. Cuanto más grande sea la protección, más costará. Y si bien le costará un dinero extra, es bueno recordar que es necesario disminuir el riesgo al mínimo posible manteniendo las armas en lugares y condiciones seguras.

Cuando estamos comprando una caja de seguridad tenemos que pensar en el destino, cuán accesible es, cuántas opciones existen por la cantidad de plata que estamos dispuestos a pagar, y cómo se desempeñan (cuál es el nivel de seguridad d cada una con respecto a robos y destrucción). Lo mejor que podemos hacer es contratar una compañía que pueda monitorear y proteger el hogar, la oficina y nuestros objetos de valor. Pero si resulta demasiado costoso, las cajas de seguridad son la mejor opción.

Sobre el autor

Nilda Nora

Soy Nilda Nora y me gusta escribir sobre decoración de interiores. Si quieren contactarme o tienen alguna consulta que hacerme, aquí debajo tienen mis redes sociales.

  • COMO YO PUEDO CONSEGUIR UNA CAJA FUERTE GRANDE Y CON PROTECCION CONTRA ROBOS Y INCENDIOS.

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