Es hora de decorar nuestra casa, y lo primero que decidimos hacer es comenzar por las paredes; estas, siendo uno de los principales atractivos y las que marcan la tendencia de la decoración; tenemos diferentes formas de cambiar su estilo, sin embargo; siempre optamos por la pintura. Existe una opción la cual muchas personas pasan desapercibida; el empapelado.

El empapelado es una de las mejores opciones cuando ya nos cansamos de la pintura. Esta técnica se usó durante muchos años, y durante ese tiempo fue una de las mejores elecciones para el decorado de las paredes.

Al pasar el tiempo, el empapelado se volvió una tarea engorrosa y muchas veces fastidiosa; por su nivel de dificultad para colocar. Pero, en esta nueva etapa del diseño; podemos encontrar diferentes tipos de empapelado que son fáciles y perfectos para nuestras paredes. Aquí en Visita Casa te daremos todos los detalles que necesites saber sobre esta técnica; para que la pongas en práctica en la decoración de tu casa u oficina.

¿Por qué cubrir las paredes con empapelado?

El empapelado sigue siendo una de las técnicas que más se usa en el diseño de interiores; si bien es cierto, que antes, decorar una pared con esta técnica suponía un trabajo engorroso, y no existía una gran variedad de diseños, esto, en la actualidad ha cambiado.

Con el paso del tiempo y las nuevas tendencias, los expertos en decoración se han encargado de hacer que el empapelado se convierta nuevamente en una gran parte de la decoración de los espacios de nuestras vidas. Ya sea colocarlo en todas las paredes, o en solamente una para crear puntos focales.

 

Un buen empapelado supone grandes ventajas para la casa y también para la oficina, y existe una gran variedad de papeles los cuales se pueden usar para recubrir las paredes. Esta técnica tiene numerosas ventajas; desde el aislamiento acústico y térmico, hasta cubrir cualquier imperfección que tenga las paredes.

Además, si se sabe escoger bien el empapelado, corremos con la ventaja de que pueda durar mucho tiempo, ya que son resistentes a la humedad y a cualquier tipo de mancha.

La opción del empapelado tiene décadas en la decoración de las familias alrededor del mundo; ya que, por su forma fácil de colocarse, no solo aporta personalidad a cada espacio; sino también, gracias a sus diferentes diseños, los cuales podemos encontrar actualmente en el mercado; se puede ajustar a cualquier tipo de decoración que hayamos escogido para nuestros espacios.

Tipos de empapelado para las paredes

Dentro del mercado actual, existe una lista variada de las diferentes formas de recubrir las paredes mediante las opciones de papeles para empapelado; estas, varían según el tipo de espacio en donde vamos a colocar el empapelado, ya que no todos funcionan a la perfección con cualquier espacio.

Papel Sólido

Este es el tipo de papel más básico. Este tipo de papel es el que vemos comúnmente en las casas; y ha estado por generaciones en el mundo del diseño de interiores. Un contra que tiene este tipo de papel, es que no tiene protección de vinilo y necesita bastante mantenimiento para mantenerlo fresco y limpio.

Aunque es el más usado en el mercado, también es el que da mucho más trabajo. Se puede usar en casi cualquier espacio dentro de la casa, exceptuando los baños, para evitar que la humedad despegue o “abombe” el papel.

Papel recubierto en vinilo

Este empapelado de pared tiene una capa delgada recubierta de vinilo, la cual brinda protección cualquier mancha. Tiene el aspecto de un papel y también necesita un buen cuidado; sobre todo, contra la humedad; al igual que el papel sólido, no es recomendable colocarlo en los baños o en cualquier parte de la casa que genere humedad.

Este tipo de papel puede resistir un lavado suave, pero no se debe de usar detergentes o limpiadores con una fórmula fuerte, ya que puede quitar el revestimiento y dañar al papel.

Cubierta de Tela

Este empapelado de pared tiene una capa superior de vinilo hecha de fibra de vidrio o de tela. Estos empapelados resisten más a la humedad y a la grasa que cualquier otro tipo. Son más resistentes y necesitan menos cuidado. Estos papeles suelen ser pesados. Cuando están cubiertos con tela, suelen tener algo de textura la que los hace ideal para esconder paredes.

Además, cubrir las paredes con tela ayuda a insonorizar las habitaciones, lo que permite que los ruidos externos no puedan penetrar los espacios de la casa.

Productos Especiales

Estos van desde la gama de texturas, relieves, papeles, hasta coberturas especiales como la seda, el bambú, hierbas, etc. Los bordes de los papeles también entran en esta categoría. Estos productos, usualmente son usados para cubrir parcialmente una pared, no se utiliza para cubrir la superficie completa de la habitación.

Por lo tanto, el mantenimiento suele ser diferente y mínimo dependiendo del material. Existe una gran variedad de estos productos en el mercado, y se debe de consultar primero con el vendedor para saber cuáles son los cuidados que necesita el producto que decidamos comprar.

Papeles Pintables

Esta opción de empapelado es para aquellas personas que quieran darle su propia personalidad al espacio; este tipo de papel no posee cubierta plástica; por lo que permite pintar al gusto de la persona, y aunque no tiene la protección que tiene el papel de vinilo, se puede limpiar fácilmente si se llega a manchar.

Además, esta opción es perfecta para aquellas personas que redecoran sus espacios constantemente, ya que, por su fácil forma de quitar, se puede pintar nuevamente las paredes sin tener que limpiar a profundidad la superficie.

Cómo escoger el empapelado para las paredes

Escoger el empapelado para nuestras paredes puede ser un trabajo fácil si disponemos del tiempo para poder hacerlo; ya que se necesita hacer un estudio a profundidad para poder escoger el papel adecuado ya sea para nuestra casa u oficina.

Lo primero que debemos tener en cuenta es que el empapelado suele ser mucho más caro que la pintura; debido a que no solo es el papel, sino también el pegamento, y la instalación. Pero este gasto, solamente se debe hacer una sola vez; y, a diferencia de la pintura, el empapelado puede ser limpiado con más facilidad.

Entonces, lo primero a tomar en cuenta es el presupuesto; si estamos seguros que queremos empapelar nuestras paredes; entonces debemos ver y disponer de un presupuesto que sea suficiente para costear el gasto. De lo contrario, lo más recomendable en esta situación es escoger una pared; si es la principal, la que crea el punto focal dentro de la habitación, entonces es mucho mejor.

Para evitar un gran gasto, puedes empapelar solamente una pared, ya sea completa o la mitad de ella, lo importante es escoger un diseño que sea acorde con la decoración y que combine con la pintura del resto de las paredes.

Siguiendo con las intrucciones

Lo segundo que debes de tomar en cuenta es el estado de las paredes. Si bien es cierto que una de las ventajas del empapelado es que permite cubrir las imperfecciones; también es importante NO colocar empapelado en las paredes que tengan humedad, ya que esta no permitirá la adhesión del papel.

Estudia el estado de las paredes; revisa si tiene algún problema de humedad o si tiene alguna gotera cerca que pueda producir que el empapelado presente este problema. Puedes tapar la gotera y lijar la pared y colocar yeso nuevamente para acabar con la humedad. Lo importante es dejar que la pared seque por completo antes de empezar con el proceso de empapelamiento.

Teniendo esto en cuenta, el tercer paso es escoger el tipo de papel que se va a colocar en las paredes. Esta decisión es muy personal; y la verdad es que no hay una opción errada; todo depende del presupuesto que se disponga y la idea de decoración que se tenga.

Antes de tomar una decisión apresurada, es necesario hacer un esquema de cómo se verá la habitación terminada, así podremos tener una idea de cuál papel debemos comprar.

Instalando el empapelado

Casi todos los empapelados tienen la misma forma de instalación; sin embargo, el empapelado de papel y el de tela tienen la diferencia; el de tela utiliza más clavos y grapas y el del papel utiliza un adhesivo diferente para cada papel.

Por ejemplo, los papeles que son vinílicos, requieren un pegamento especial de cola vinílica; y los que no son de este material, necesitan un pegamento el cual debe ser reforzado con resinas sintéticas.

Y en el caso de aquellos papeles que son ligeros; una cola que sea universal basta para colocar el empapelado en la pared. Además, existen los papeles autoadhesivos los cuales como su propio nombre lo indica, no necesitan de ningún pegamento porque ya tienen el suyo propio.

Teniendo esto en cuenta; para empezar con la instalación del empapelado se debe aplicar una capa de fijador sellador a las paredes que son nuevas; es decir, aquellas paredes que nunca hayan sido pintadas; también, es necesario colocar una mano de pegamento vinílico para mayor protección.

¿Qué hacer con las paredes que ya tengan pintura?

En el caso de las paredes que tengan capas de pintura, se debe lavar, lijar y retirar toda la pintura que sea posible; si hay rastros de humedad, se debe reparar; y, además, se debe utilizar masilla para tapar cualquier imperfección que pueda hacer que el papel se dañe.

Luego de esto, se debe de medir el papel antes de proceder a colocarlo; para así evitar que sobre salga demás de los bordes; ya que el proceso de cortar el papel luego de que quede adherido a la superficie puede ser un procedimiento engorroso si no se tiene experiencia manejando este material.

Por eso, lo recomendable es que el papel solamente tenga un excedente de 10 a 15 centímetros, no más de ahí; para evitar rasgar o un mal corte luego de haberlo adherido a la pared.

¿Cuál es la forma correcta de pegar el empapelado?

Siempre se debe pegar el papel de forma vertical y no horizontal, de estar forma se podrá disimular mejor las líneas. Luego de haber limpiado la pared y de haber colocado la capa protectora; tenemos que encolar la tira de papel con una brocha, y dejarla reposar durante al menos unos 5 minutos o lo que las instrucciones del pegamento indique.

Mientras esperamos a que se seque el pegamento, podemos trazar las líneas en la pared; para poder tener una mejor visual sobre en dónde va el papel.

Con mucho cuidado se debe seguir la línea, si necesita ayuda, pídala; este trabajo no es algo para hacer en solitario, y trate de excederse los centímetros recomendados anteriormente.

Finalmente, recuerde retirar todas las burbujas de aire, para evitar que la humedad; o el mismo aire penetre y arruine el papel y el proceso de empapelamiento, si es necesario, pinche el papel con una aguja para soltar la presión. Y repita el proceso con el resto de la pared.

Referencias:

Más de 25 ideas increíbles sobre Empapelar paredes

Cómo pintar sobre un empapelado

Doce ideas para decorar paredes

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